¿Sabes cuál es el material ideal para la protección pulpar?

18-05-2022

En cualquier tratamiento restaurador, todo dentista tiene un objetivo claro: proteger la salud pulpar del diente. Es la clave para que el resultado del tratamiento se considere exitoso a corto y largo plazo, y beneficioso para el paciente.  
Para ello, es necesario saber qué tipo de protección pulpar se va a realizar, y utilizar el material adecuado para conseguir preservar la vitalidad pulpar y prevenir la sensibilidad dental.  
Inibsa

¿Tipos de protección pulpar? 

Existen dos tipos de protección pulpar: la directa y la indirecta. 

La protección pulpar directa es aquella que el dentista usa cuando existe una exposición de la pulpa. Los motivos por los que ha llegado a la exposición pueden ser por una acción traumática o mecánica, y también por caries. En el caso de ser por este último motivo es probable que el procedimiento a llevar a cabo sea más complicado que en el caso de un traumatismo, por ejemplo. Aun así, es cierto que, si la caries es pequeña y el dentista la ha detectado a tiempo, el recubrimiento pulpar directo puede ser una solución eficaz.  

En cuanto, a la protección pulpar indirecta, no existe exposición de la pulpa, pero sí que está comprometida. Para preparar la cavidad en estos casos, se propone en primer lugar eliminar la dentina infectada, porque está reblandecida y el colágeno desmineralizado. A continuación, mantener solo 1 mm de dentina afectada antes de aplicar el protector pulpar. ¿Por qué mantenemos dentina afectada? Porque a pesar de poder estar desmineralizada, y tener una textura más suave que la dentina sana, mantiene el colágeno, no está contaminada y puede remineralizarse.  

El material ideal para la protección pulpar 

Actualmente, en el mercado se encuentran cuatro materiales para la protección pulpar: el agregado de trióxido mineral (MTA), el hidróxido de calcio (CaOH), el ionómero de vidrio y el Theracal LC que es un material a base de silicato de calcio modificado con resina. 

El ionómero de vidrio tiene la propiedad de baja solubilidad, que permite un buen sellado, y es fácil de usar, lo que supone para el profesional un ahorro de tiempo, pero libera flúor con efectos citotóxicos cerca de pulpa1. Además, su pH inicial puede dañar el complejo dentino-pulpar2 

Por otro lado, el hidróxido de calcio, libera calcio y regenera la dentina, y a la vez su pH alcalino inhibe la proliferación de bacterias, pero su manipulación no es sencilla y no promete un buen sellado porque se disuelve con el tiempo3.   

Por último, el trióxido mineral (MTA) libera calcio, tiene un pH alcalino y ofrece un buen sellado. Es el material más versátil, con más propiedades y beneficios del mercado. Sin embargo, tiene un pero. El tiempo de polimerización es elevado y su manipulación es compleja 4 

Por este motivo, para protecciones pulpares el material ideal es el   silicato de calcio modificado con resina (Theracal LC), que tiene todos los beneficios del trióxido mineral y, además, tiene una manipulación sencilla y es fotopolimerizable. 

 

 

1 Kranjevac T, Milovanovic M, Volarevic V, Lukic ML, Arsenijevic N, Markovic D, et al. Cytotoxic effects of glass ionomer cements on human dental pulp stem cells correlate with fluoride release. Med Chem. 2012;8(1):40–45. 

2 Selimović-Dragaš M, Huseinbegović A, Kobašlija S, Hatibović-Kofman Š: A comparison of the in vitro cytotoxicity of conventional and resin modified glass ionomer cements. Bosn J Basic Med Sci. 2012, 12: 273-278. 

3 Francisconi LF, de Freitas AP, Scaffa PMC, Mondelli RFL, Francisconi PAS. Water sorption and solubility of different calcium hydroxide cements. J Appl Oral Sci. 17(5):427–431. 

4 Schmitt D, Lee J, Bogen G. Multifaceted use of ProRoot™ MTA root canal repair material. Pediatr Dent. 2001;23(4):326-330.